Comience desde la infancia DANDO a su hijo TODO LO QUE LE PIDA y así crecerá convencido de que el mundo entero le
pertenece.
No se preocupe de su EDUCACIÓN ÉTICA o
espiritual. Espere a que sea mayor para que decida.
Cuando diga palabrotas o INSULTOS, ríase.
Esto lo animará a hacer cosas más graciosas.
NO LE REGAÑE ni le diga que está mal algo
de lo que hace. Podría crearle traumas o complejos de culpabilidad
RECOJA TODO lo que él deje tirado: libros,
zapatos, ropa, juguetes... Hágaselo todo. De este modo se acostumbrará a cargar
su responsabilidad sobre los demás.
DÉJELE leer y ver todo lo que caiga en sus
manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados, pero no
de que su mente se llene de basura.
DISCUTA y riña con su cónyuge en presencia
del niño, así a él no le dolerá demasiado el día en que la familia, quizá por
su propia conducta, quede destrozada para siempre.
Dele todo el DINERO que quiera gastar, no vaya
a sospechar que para poder disponer de él es necesario trabajar.
SATISFAGA todos sus DESEOS, CAPRICHOS,
apetitos, comodidades y placeres. El sacrificio y la austeridad podrían
producirle frustraciones.
PÓNGASE DE SU PARTE en cualquier conflicto
que tenga con sus profesores y vecinos. Piense que todos ellos tienen
prejuicios contra su hijo y que lo de verdad quieren es fastidiarlo.
"SI YO ME HAGO AMIGO DE MI HIJO, MI HIJO SE QUEDA HUÉRFANO"
Juez de Calatayud
Muy interesante a pesar de ser psicóloga. Felicidades por el contenido, desde Barcelona.
ResponderEliminarRecién abro esto y me sorprende el comentario "a pesar de ser psicóloga"... y luego las felicitaciones. Vamos anónimo el escudo no oculta tu bajo nivel.
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